Marruecos: Tan lejos, tan cerca.
Introducción:
Marruecos a mi entender es un país impresionante, a pesar de ser un país sucio en general, con costumbres y aptitudes, las cuales no apruebo, comida que no me gusta, es el único país visitado que es capaz de impresionarme cada quince minutos o cinco kilómetros, (para bien o para mal).
Tenemos que desterrar mitos preestablecidos como: es un país inseguro, lleno de droga etc..
Son varios ya mis viajes a Marruecos y todos resultan diferentes, tiene contrastes muy marcados, es muy diferente la costa al interior, el norte al sur, las grandes ciudades a pequeños pueblos.. El comentario generalizado es “otra vez te vas a Marruecos ”, pues si, así, como en el mundo occidental las ciudades prácticamente son iguales, las carreteras etc… aquí va cambiando constantemente, tiene un no sé que, que, que sé yo, que engancha.
A pesar de tener un crecimiento económico muy rápido y sobre todo de cara al turismo mantiene su esencia, ¿hasta cuando?, Creo que el interior aun tardara bastante, y sino siempre se puede buscar.
La impresión personal es estar en un país como en la España hace varias décadas, en que parte de la población vive a la ultima, parte se busca la vida, y parte no tiene nada tierra virgen y otra sobre explotada, en fin diferente.
Planteamiento del Viaje:
El viaje estaba planteado en Noviembre 03, con intención de ver lo más posible en veinte días y acompañado de mi novia y dos amigas, las cuales nunca habían estado en Marruecos.
Tras mis experiencias haciendo trekking por el Toubkal (Montaña de 4167m) y por la controvertida sierra del rif, tenia claro varios aspectos:
No más de 200 kilómetros diarios.
Viajar de día.
Dormir donde se pueda, si hay “hoteles” en hotel, sino, mi pareja y yo en furgoneta y las otras dos en tienda.
Comer lo que se pueda por el camino, o puestos callejeros.
Visita obligada al desierto.
Tener sustento para tres días y trescientos kilómetros.
La Ruta:
La ruta elegida como se puede ver en el mapa cubre gran parte del país, elegida a tenor de las informaciones recopilas en las guías y preferencias propias de anteriores viajes, puede que no sé la mejor, pero si es muy bonita y recomendable, sin duda y con mas tiempo se puede ampliar como comentare a lo largo del relato.
He marcado con puntos amarillos las zonas en las que haré especial hincapié como resumen de las etapas, no quiere decir que lo demás haya que despreciarlo, sino todo lo contrario, puesto que es un viaje para disfrutar en ruta y sin prisa.
La ruta se completo en sentido de las agujas del reloj, el motivo es que en la primera parte del viaje hasta Marrakech, es la mas complicada y en la que más contratiempos pueden surgir además de tener la esencia pura de Marruecos, al tener fecha tope de regreso la zona atlántica tiene mejores carreteras con lo que las distancia a recorrer pueden ser mucho más largas y menos interesantes como se ve en el tramo de Casablanca.
El inicio:
Una vez cruzado el estrecho, nos abastecemos en Ceuta, sobre todo de gasolina que esta mucho más barata, también podemos empezar a cambiar dirhams, que son más baratos en las casas de cambio que en el cambio en la calle o tiendas, no hay problema en utilizar euros en todo el país en los pequeños comercios, aunque el cambio lo hacen más caro.
El paso de la frontera es lento una hora como mínimo, rellenar unos papeles entregar pasaportes sellar etc…
Hay unos amables señores que se encargan de todo si no queremos molestarnos, bajo la correspondiente propina.
Una vez pasada la frontera camino de Tetuán hay mercados de estraperlo urbanizaciones de lujo etc…
Yo no suelo parar en Tetuán, la razón es que es la ultima ciudad importante antes de la frontera, con lo que eso implica, un descuido nos puede arruinar el viaje, y a priori no merece la pena.
Una vez en Tetuán tomo una carretera que va a la costa, para mí y mis acompañantes es uno de los parajes de costa mediterránea más bonitos que jamás he visto, un agua preciosa, playas vírgenes, nada que ver con las costas españolas que se ven al fondo.
La carretera es mala, pero no hay casi nada de circulación, salteada de pueblos de pescadores en los cuales se puede comer unas sardinas recién pescadas a la brasa por precios ridículos.
Es un tramo altamente recomendable para disfrutar de la conducción, ojo con los niños cabras y baches.
Al no haber circulación y ser una zona de montaña suelen corretear por la carretera.
Hay puestos de vigilancia del ejercito por toda la costa, pero no hay problemas, si queremos dormir en una playa es mejor comunicárselos a la policía del pueblo, sino pueden venir a incordiar a mitad de noche, recordar que de estas zonas salen los transportes urgentes a la península.
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En Al Hoceima es obligado retroceder o ir a Ketama.
De camino a ketama, se sube rápidamente, en la parte final hay unos bosques de cedros preciosos, esta zona tiene un olor especial, la carretera no es mala, pero si hay muchas curvas.
Una vez en ketama la cosa se complica, tampoco es muy recomendable el parar, es una zona donde se cultiva no sé que especia que se empeñan en vendernos, esto es lo peligroso por que se ponen en la carretera de curvas a la par de nuestro coche con otro ofreciendo auténticos ladrillos por la ventanilla.
Esta zona lamentablemente la hicimos de noche y con niebla, ¡un estrés!, no nos molestaron pero lo pase fatal al volante, mejor hacerla de día.
Llegada a chefchaouem.
Creo que es una ciudad encantadora, merece la pena ir de propio, la única pena es que son muy pesados intentando vender condimento
. Por lo demás impresionante, podemos dejar los coches en el parking del hotel la parte alta por un módico precio, no es difícil encontrar pequeños hoteles donde dormir o algún parking en la parte baja donde acampar.
De verdad merece la pena.
En un viaje anterior hice un trekking por la cordillera del rif, lleno de cedros y plantaciones, es un paraje singular, con un olor especial, con sonido especial, se ha de hacer a pie y dura varios días, no recomendable sin guía, que se puede contratar en chefchaouen.
De camino es buena carretera aun que no hay que resaltar nada especial.
En la entrada a fes esta la policía con un supuesto radar, la cual para a todos los extranjeros que pueden para sacarles dinero, yo no vi el radar, piden dinero, a nosotros uno 50 euros, negociamos y pagamos 10, es una consecuencia de los atentados de Casablanca, en la que el gobierno otorgo mas poder a la policía, aunque algunos no lo entendieron bien, lo intentaran en varias ocasiones, así despacio y hacerse el loco de no entender lo que dicen, a veces da resultado.
En fes, como en casi todos las ciudades existe la parte vieja y la nueva, nosotros dormimos en una pensión en la parte nueva y metimos la furgoneta en un garaje/parking, así les dije que miraran un ruidillo que hacia la rueda de atrás, en taxi fuimos a la parte vieja, lo más interesante esta dentro del zoco, es difícil de encontrar, con lo que recomiendo coger un guía para que nos enseñe lo que queremos ver, aunque siempre nos intentara llevar a tiendas para llevarse comisión de lo que compremos, nosotros personalmente le dijimos de ver los monumentos, los curtidores, artesanos, palacios etc... y de compras solos, en todas las calles principales en lo alto pone la dirección a la salida mas cercana, es cuestión de fijarse seguirla cuando nos interese., es posible que la misma tienda no la veamos dos veces o la veamos ocho, hay que regatear p.ej. por una manta piden 2200 y lo baje hasta 200 dirhams por una manta.
Hay una carretera que circunvala toda la parte vieja como curiosidad esta bien ver todo desde lo alto, así como el humo de las fabricas de cerámica.
Por cierto al llegar al parking tenía toda la parte trasera de la rueda desmontada, era el rodamiento roto completamente, enseguida me propuso varias soluciones, desaguase, caro por que vendían también la suspensión, tornero, como ultimo remedio y la volskwagen, en este caso el repuesto estaba en Casablanca, lo pedí y a esperar, les dijimos que volveríamos al día siguiente para saber algo.
Por la noche estando en la entrada del zoco uno de los chicos se acerco para ver si no veía ¿cómo lo harán? Y nos dijo que no sé quien, por la tarde vino de Casablanca en un taxi con la pieza, que a primera hora estaría en la tienda. ¡Impresionante¡, a primera hora de la tienda al taller y por la tarde reparada, como luego comprobé, por un precio similar a España todo incluido y de regalo una llave que se dejaron colocada en una tuerca debajo de la furgoneta que encontré una vez en España.
En cuanto a Meknes, no hay mucho que decir, a mí me defraudo un poco, ya sea por el día, lluvioso o que comparado con Fes, resulta un poco pobre.
Aquí empieza la segunda parte del viaje, en principio tenia la intención de ir hacia las cascadas del Ouzoud pero el guía de Fes nos aconseja la ruta alternativa y nos alegramos por ello.
Hay que saltar la cordillera del atlas con lo que eso implica, puentes, quien ha dicho puentes, túneles, quien ha dicho túneles….
El camino ya en si es un recreo para la vista, una vez saltada la cordillera, todo cambia, el paisaje, la gente, todo, a pesar de ser una etapa maratón, no cansa, vas mirándolo todo, extasiado, los días han salido un poco juguetones y a causa de ello ¿quien ha dicho que en el desierto no llueve?, el día anterior llovió un poco y así se quedo.
Cuando ya tenia a mis chicas con las chanclas puestas para andar delante de la furgoneta, esta especie de autobús empezó la marcha, nosotros detrás y las motos de enfrente salieron al ver que no nos hundíamos, así conseguimos librarnos de unas decenas de coches que estaban esperando pasar, (prisa mata).
En esta etapa paro en todas las gasolineras con el fin de llenar siempre el deposito, no sabia si habría mas gasolineras delante, y en un viaje anterior nos quedamos sin dinero y en las gasolineras solo admiten la visa de Marruecos, (ojo con este dato).
Una vez en Erfoud ultima frontera antes del desierto, nos asaltan varios guías los cuales nos ofrecen sus albergues al pie de las dunas, acompañado por uno de estos, vamos al albergue de su familia, situado a pie de la gran duna, una vez negociado el precio decidimos ir a dar una vuelta en camello con noche en el desierto, es una experiencia única, no he visto tantas estrellas juntas en mi vida, creo que merece la pena, aunque la cama era la arena y la cena no es gran cosa, a la mañana el paseo fue precioso, pero ¡que duros que son los camellos!.
De camino a Marrakech, pasamos por las gargantas de Todra y Dades, las cuales son muy bonitas, nos adentramos hasta donde era recomendable sin todoterreno y nos dijeron que más allá era menos interesante.
En Ouarzazate, hay una especie de palacio, que era en el que se reunían las caravanas que venían del desierto, en esta ocasión no paramos puesto que sé hacia de noche y recordaba que el tramo que quedaba era muy malo.
Existe la posibilidad desde aquí ir al valle del draa una zona también muy bonita que va a para al desierto, aun similar al camino de Erfoud, yo la había visitado en un viaje anterior y al ser similar decidimos saltarla.
El tramo hasta Marrakech es muy malo y lo hicimos de noche, acabe muy cansado.
Marrakech, la ciudad por excelencia, ciudad de compras (aunque no la más barata), la noche en la plaza es muy divertida, yo siempre duermo en un hotel cutre que esta en la misma plaza, pero tiene la terraza donde se desayuna que da a la plaza no es caro y esta enfrente del zoco también.
Hay justo debajo un parking donde dejar la furgo y un par de callas mas abajo también, se puede visitar toda andando tranquilamente, el trafico es un caos y peligroso.
Esta ciudad merece la pena volar solo para visitarla, aunque ya note mucho cambio en un par de años, convirtiendo en demasiado turística.
De aquí hicimos una excursión a las cascadas de Ouzoud, no es complicado y es bonito, en la entrada se ponían pesados en que cogiésemos un guía, diciendo que si hay animales peligrosos etc…. , nosotros hicimos caso omiso, ni vimos ninguno, eso si nos perdimos y tuvimos que hacer monte a través, quizás por eso nos seguían en la distancia, ¡¡¡¡¡ sabían que nos íbamos a perder!!!!, pero como era cuesta abajo, no hay perdida.
Ya de camino a Essaoura vimos un atardecer precioso, llagamos de noche, y preguntando nos alquilaron una casa por un precio ridículo.
Por la mañana vimos que era un sitio paradisíaco donde se respiraba calma, nos quedamos mas de lo pensado, pero merece la pena.
De aquí, nos hubiera gustado bajar a Agadir y a la frontera con el Sahara, pero por tiempo fue imposible.
De retorno fuimos por toda la costa atlántica con kilómetros y kilómetros de playas vírgenes, impresionantes, no sé cuanto durará.
Visita rápida a Casablanca y Rabat, que al ser grandes ciudades, vimos la mezquita la parte vieja y poco más.
Dormimos el Larache, antigua colonia Española, ya el resto del camino por Tánger, nos pillo el temporal, niebla etc… Íbamos con miedo porque las noticias decían que el paso estaba cortado y nosotros muy mal de tiempo, pero por fin embarcamos después de esperar varias horas y aquí termina el viaje.
Conclusión:
Impresionante.
Esperamos volver, mi chica esta todos los días recordándomelo.
No tuve sensación de inseguridad en ningún momento, no me robaron, con lo que el mito no es cierto.
Volveré con furgo, puesto que los garitos de dormir son malos, sucios, eso si baratos o tiene que ir a las ciudades principales con lo que pierdes la vivencia del los pueblo a la par de hacer muchos kilómetros.
No pudimos dormir en la furgo por las acompañantes y los regalos, pero en todos los pueblos hay una plaza donde hay un vigilante para aparcar y dormir un euro o dos pasas la noche seguro.
Hay que hacer de tripas corazón, puesto que es un país en que los estándares de limpieza no son los mismos, pero si queremos todo como en casa, mejor quedarse en casa.
El mayor gasto fue los regalos, por lo demás es barato.