Después de ver muchos modelos posibles y pensar en distintas posibilidades, por fin creo que he conseguido integrar con el mayor número de piezas originales
Westfalia un
extractor de humos para los tiempos de cocinado, que además nos puede servir también para evacuar el
aire húmedo de la colada o el caliente producido por un
estacionamiento prolongado al sol. Además cumple la misión de
aireador y mosquitera para el buen tiempo. ¿Puede haber un elemento más versátil?
Para elaborar este aparato nos vamos a basar en la
rejilla metálica de origen del lado del conductor (es distinta la derecha que la izquierda)
y sobre su cara interna situaremos una
caja de aluminio de fabricación casera en la que irán alojados
cuatro motores.
La principal ventaja de usar esa pieza
Westfalia es que conservamos para este extractor la capacidad de
bloquear la ventanilla corredera con sus pestañas para el cristal y así evitar posibles robos de la pieza o en el interior de la
furgo.
Al
evacuar el aire caliente de dentro afuera, obliga a entrar por otras aberturas fluídos renovados que crean una
agradable corriente indirecta, menos molesta que el chorro directo de un ventilador tradicional.
Además,
no resta espacio interior porque es de formato
extraplano (sólo
45 mm de grosor), que no molesta nada tras la tapa de la encimera.
Las
tiendas de reparación de equipos informáticos (en cualquier barrio hay una) son un filón insospechado de recursos. Por ejemplo, cada día se tiran a la basura varias
fuentes de alimentación de ordenadores personales antiguos.
De cada una de ellas nos pueden servir varios elementos como los
ventiladores o las
clavijas de tres pines planos (E 9302) hembra/macho.
Los ventiladores utilizados en este
brico pertenecían a equipos un poco más grandes,
pero nos pueden servir perfectamente los de
PC (poniendo, por ejemplo, 6 u 8 unidades).
Para construir la caja de aluminio que actuará de
bastidor y carenado de todo el sistema, usaremos un retal de
chapa de aluminio de entre 1 y 1.5 mm de pared
con las
medidas siguientes
que podemos dibujar en la pieza y recortar con una caladora provista de hoja para metales no férricos.
Seguidamente dibujamos los espacios que más convengan a la evacuación del aire por la forma de los motores
y
calamos los vanos como en las clases de marquetería del colegio.
No hay que olvidarse tampoco de pintar y taladrar tanto los anclajes de los ventiladores como los
huecos para cuatro interruptores
Westfalia y otros cuatro testigos luminosos para 220 V.
Así podremos
controlar el encendido de los aireadores juntos o por separado. Y al tener indicadores luminosos no nos olvidaremos de apagarlos y tendremos más pecaución de no introducir objetos por las aspas.
El hueco normalizado para el interruptor
Westfalia es 30 x 11 mm y el de los testigos de 220 V 13 mm ø
La
conformación y plegado de chapas de aluminio o acero no es más, si se mira bien, que una
papiroflexia de grado enésimo.
Para hacer las dobleces de cada una de las partes de la caja vamos a usar la técnica de
plegado por solapado en molde. Es decir, sujetando una parte de la pieza mediante gatos o sargentas obligamos a ceder a lo que queda en voladizo mediante el brazo de palanca que nos ofrecen otros más pequeños.
El remate final de cada pliegue se consigue con el
martillo de mecánico golpeando a través de un taco de madera que se suele llamar
mártir o
sufridera.
Primero doblamos las
aletas que servirán para fijar la caja a la rejilla mosquitera, tanto de un lado como del otro
y después, poniendo
boca abajo la pieza, cada uno de los
cuatro lados que hacen el grueso del mueble, ligeramente mayor al de los ventiladores para alojarlos con holgura.
Para doblar las
dos últimas faldillas es muy útil construirse una pieza con tablero aglomerado de poca calidad
exactamente igual al
volumen interior de la caja. Así podremos dar la forma exacta final.
Luego, sacada esta pieza del alojamiento,
nos puede servir muy bien en el trabajo diario de
bricolajeo como
soporte para hacer taladros a otras piezas sin estropear la encimera del banco.
Naturalmente las
aristas que quedan en las cuatro esquinas, por muy bien aproximadas que estén, siempre quedarán
ligeramente separadas.
Remataremos esta parte poniendo tanto por dentro
como por fuera de la unión
un
cordón de masilla arreglatodo Pattex que en unos cinco minutos podremos
lijar,
de forma que todo quedará listo para aplicar la capa de
aparejo (éste es el habitual en pintura del automóvil)
que preparará las superficies para el esmalte de acabado
a pistola o
spray, en este caso, en el mismo tono que las rejillas originales.
Así quedaría por dentro, imitando un perfecto
cordón de soldadura,
y así por fuera, como el acabado de la chapa de la propia
furgo.
Acabada la fase de
carrozado, procedemos al
montaje primero de los ventiladores, que se fijan con remaches,
y de los
elementos eléctricos después (testigos,
conector de red,
regleta
e interruptores).
Los
testigos, como tienen el cable muy corto al comprarlos, podemos alargarlos un poco soldandole un par de segmentos del mismo conductor y luego aislando con cinta.
Para unir todos ellos mediante hilo seguimos este
esquema eléctrico,
M=motores L=lámparas testigo.
usando cuando proceda los terminales
fast-on estrechos (en los motores)
o
anchos (en los interruptores).
Hecho todo, probamos que funciona correctamente y con cinta adhesiva de doble cara fijamos el armario a la rejilla, con lo que terminamos de hacer un bloque extractor compacto.
Es importante
pegarlo y no remacharlo para evitar posibles entradas de agua a través de los taladros y desde luego para no menoscabar desde fuera de la
furgo la estética original.
Con un rotulador indeleble del mismo color, pintamos los remaches para que no destaquen.
He descartado instalarla
en la puerta corredera, a pesar de estar al lado de tomas de 220 V, porque el cable podría interferir en la apertura y cierre de la puerta; porque sobrecargaríamos los rodamientos; y también porque es de mucho más rendimiento aspirar el humo al lado de la cocina.
Una opción interesante es poder regular en
cuatro niveles la intensidad de la aireación: no es lo mismo operar con un ventilador
(indicado para tener toda una noche de verano manteniendo un ambiente fresco, por ejemplo) que la gran evacuación que se necesita durante una fritura en la cocina (posición cuatro motores).
Como los que no hemos estudiado ingeniería somos vulnerables a los
errores en el diseño, he aquí uno bastante
de primerizo: no me había percatado de que el conector recto puesto en la carcasa me iba a impedir tanto cerrar la cortina cuando no se usa el extractor como abrir completamente bien la tapa de la encimera.
En realidad, lo correcto hubiera sido poner el conector empotrable
en la chapa del lateral en lugar de en el frente (si alguno se anima a hacerlo, ya sabéis...), pero como
a grandes males grandes remedios, la solución ha sido
crear una clavija acodada.
Comprarla es casi imposible, porque se comercializan en pocos lugares, de modo que, utilizando la hembra que nos quedaba en la caja de la fuente de alimentacion vieja,
la desposeemos con un alicate de sus laterales
y le soldamos los cables de un alargador normal.
Luego carenamos el cuerpo en forma de codo con la
masilla arreglatodo Pattex.
Finalmente lo lijamos a nuestra conveniencia y lo pintamos de un color uniforme.
Así, si no nos interesa que la campana quede a la vista, podemos ocultarla completamente con las cortinas interiores.
Si en algún momento concreto no queremos usar la campana (un día de lluvia torrencial con viento
de hostigo, cuando abandonamos la
furgo durante mucho tiempo...),
el módulo se retira cómodamente tirando hacia arriba y hacia adentro como un bloque compacto. Después se guarda en cualquier rincón del maletero.
Para alimentar este accesorio he tendido un alargador desde el inversor de 220 V situado debajo de la cama. Entonces, aprovechando que la línea ya llega hasta esta zona de la encimera, se me ocurre que puede ser útil para otras cosas como la cafetera eléctrica.
Pero como los electrodomésticos normales en España llevan la clavija tipo
F Schuko o
C, en vez la
E 9302, y los
adaptadores son casi nulos en nuestros comercios, he construido uno de forma casera, pero segura.
Simplemente hay que reutilizar el empotrable macho de otra caja de vieja fuente de alimentación y recortarle lo que le sobra por los lados.
Después se sueldan los hilos a una euroclavija tipo
C (este caso) o
F estándar
y se rellena el espacio intermedio con
masilla arreglatodo Pattex.
Lijado el exceso,
se pinta todo del mismo tono.
Y ya tenemos
interfaz.
Saludos.
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