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Escrito inicialmente el día: 13/Nov/2004 17:17
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Chevrolet Sonora
Una decisión inteligente

Chevrolet Sonora
Una decisión inteligente

Hay vehículos que sobreviven al paso del tiempo, que van más allá de la moda, de la tentación de ser sólo una novedad más. La Chevrolet Sonora es una buen ejemplo de ello.


La compra de un auto es, normalmente, motivada por la emoción, por la novedad, por lo que está de moda. Todo esto está muy bien, pero es el comprador inteligente el que terminan por hacerse de los mejores modelos y en las SUV de tamaño completo, la Chevrolet Sonora está sin duda entre ellos.
Cuando un modelo nuevo llega al mercado, la gente se vuelca hacia ellos como un enjambre de abejas sobre un panal. Pero los modelos nuevos de autos, muchas veces pasan por problemas de ajustes en sus primeras etapas de construcción, algo que resulta en problemas al largo del tiempo, en ruidos molestos a los pocos kilómetros de uso y en terminados de poca calidad. La prisa, todos saben, es enemiga de la perfección. Además hay otro detalle. En un modelo de lanzamiento reciente, la fuerte demanda envía los precios al cielo, exactamente el opuesto de lo que ocurre con modelos con algunos años en el mercado. Oferta y demanda, una de las leyes de mercadotecnia. Y después de manejar esta Sonora durante las primeras dos semanas de lo que será este prueba de mediano plazo, nos queda todavía más claro que es un producto al que bien vale la pena echarle una segunda mirada.


Es casi innecesario describir este modelo. Pocos son los que no conocen esta camioneta de aire poderoso, dimensiones generosas y caminar suave. Su base es la misma de una conocida aún más familiar a los mexicanos, la Suburban. Esto, de por si, ya es una garantía de que se trata de un vehículo hecho sobre un muy buen punto de partida. La Sonora tiene el chasis de la Suburban, el motor de aquella y demás componentes mecánicos como fresnos, suspensión y dirección. Es, por lo tanto, una camioneta sólida, confiable, comprobada a través de los años.
Sin embargo, la Chevrolet Sonora tiene un par de ventajes extras sobre su "hermana mayor". La primera de ellas es su dimensión reducida comparada contra la Suburban. Son 518 milímetros menos que le añaden una maniobrabilidad mucho mejor, hablando en términos urbanos, por supuesto. Este menor tamaño también implica otro ahorro: el de combustible, fruto de los 135 kilogramos menos de peso de la Sonora comparada a la Suburban.
Claro, este menor tamaño significa también un menor espacio en la tercera fila de asientos, al igual que en la cajuela, pero de esto se trata esta camioneta, no es una competidora de la Suburban, es una alternativa para quien no necesita cargar con tantas personas durante todo el tiempo, aunque también existe esa alternativa, ya que no se anda precisamente incómodo en la tercera fila de asientos de esta camioneta.


Tan acertadas son las proporciones de la Sonora, que en Estados Unidos, tierra de las SUV por excelencia, este modelo aún venda nade manos que unas 220 mil unidades al año, hablando sólo de la Tahoe, sin contar con la versión hermana de GMC, la Yukon. Esto es nada menos que tres veces más que las ventas de la Suburban. Y esto que, si alguien no reclama de falta de espacio en sus calles y carreteras, son los vecinos del norte. Para nosotros, con nuestros centros y suburbios de calles angostas y gasolina a un precio mucho más alto, la Sonora hace aún más sentido.
Si por fuera la Sonora se parece a la Suburban de la generación anterior, que no ha adoptado la "cara enojada" de las nuevas camionetas de Chevrolet, por dentro la única forma de darse cuenta de que no estamos al mando de una Suburban es sentándose en la última fila de asientos o mirando con detenimiento por el espejo retrovisor y poniendo atención, para percibir que le "falta" algo de camioneta después de la cajuela.


El equipo y el lujo son los mismos y ahí está prácticamente todo, de los asientos forrados de cuero al aire acondicionado digital dual para los pasajeros delanteros, al igual que sus salidas para las filas posteriores de asientos. Claro, no pueden faltar detalles ya indispensables como el reproductor de discos compactos con capacidad para seis CD o los múltiples portavasos. Claro, como buen vehículo del estilo y bien equipado, nuestra Sonora está equipada también con un reproductor de DVD, que tiene además el buen gusto de poner la entrada del disco y el mando en la parte trasera del vehículo. Si el chofer y el copiloto no van a ver las películas, no tiene por qué tener el mando de ellas. Claro, sería mucho mejor que fuera de región 4 y no 1, al cabo estamos en México, pero nadie es perfecto.


Otra forma de percibir la diferencia entre la Sonora y la Suburban es manejando. La Sonora responde más rápido a las presiones sobre el pedal del gas, lo que es normal por su tamaño y peso. También es más ágil en el momento de hacer cambios de carril, rebases y maniobras de estacionamiento. Claro, pierde un poco de calidad de marcha debido a su algo menor distancia entre ejes (35,6 centímetros menos), pero sigue siendo un vehículo extremadamente cómodo, una verdadera delicia. Además, hay que destacar la excelente insonorización de la cabina. Dentro de la Sonora, con el aire acondicionado puesto y buena música a bajo volumen, uno se olvida que hay ruido en la calle.


Ahora estamos apenas comenzando un periodo de mediano plazo con la Sonora. Vamos aprender a convivir con ella, ver sus virtudes y problemas. Analizar su consumo de combustible y si fue necesario acudir a un concesionario GM para reparar algún problema, algo que no creemos que ocurra ya que, por si usted no sabía, la Sonora es la número uno en su categoría en el estudio de durabilidad de JD Power en Estados Unidos. Claro, esto es algo que su tiempo en el mercado ayuda a que ocurra, por esto dijimos, al comenzar esta prueba, que hay vehículos que se compran porque están de moda, otros, como la Sonora, porque son una decisión mucho más inteligente.

Sergio Oliveira / Autos.com.mx