Fijaos en qué cosa más curiosa:
Situaos por un momento pulsando
en este enlace sobre la
casa-cuartel de la Guardia Civil en Burgos, que como ya sabéis ha saltado a la fama porque en torno a las cuatro de la madrugada del pasado 29 de julio explotó una furgo
Mercedes-Benz Vito de color blanco.
Las personas que aparcaron el vehículo habían observado tiempo atrás que
un frutero de la ciudad tenía también una furgo Vito blanca y la solía aparcar justo en la calle Jerez frente a la fachada trasera de la casa-cuartel. Así es que robaron en Francia una muy parecida, le pusieron las placas de matrícula del vecino de Burgos y así paso inadvertida en los controles de seguridad que se realizan a diario en el perímetro de la instalación militar.
Hasta ahí lo que sabemos por la prensa.
Pero trasteando en internet, fijaos hasta qué punto
nos controlan desde el aire: se puede apreciar en uno de los visores más consultados, el
Sigpac, cómo hay estacionada en el momento en el que el satélite hizo la foto, la que parece ser la
Vito blanca que era habitual del aparcamiento de tierra.
Pero es que en otro de los visores, el
Google Maps, que se supone
hecha en otro momento completamente distinto, sigue apareciendo, aparcada a escasos metros, la que parece la misma
furgo.
Luego no cabe duda de que el paisano solía aparcar allí de forma habitual.
Si todo esto se puede apreciar gratis y por nosotros, que somos gente corriente, ¿qué no verán los espías de los estados más poderosos? ¿Tenemos privacidad debajo del techo o también lo traspasan con tecnologías que ni sospechamos?
Definitivamente,
lo saben todo de nosotros.
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