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Autor Tema: Prueba Volkswagen Amarok 2.0 TDi 163 Highline  (Leído 1091 veces)



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Prueba Volkswagen Amarok 2.0 TDi 163 Highline
« en: Vie, 13 Julio 2012, 17:29:21, pm »
Volkswagen es uno de los mayores fabricantes mundiales de automóviles y todo y así no está presente en todos los segmentos, como si lo está Toyota, el mundo del Pick-up era uno de estos segmentos, y la marca de Volksburg lo ha solucionado presentado su primera camioneta.



El Amarok es un desarrollo propio de Volkswagen, pensado para muchos países dónde este tipo de vehículos duales, comerciales y de ocio, tienen una gran aceptación, como es el caso de America latina, Portugal o Estados Unidos.

Aunque tenían la ocasión de realizar un producto revolucionario, la firma alemana ha ido a lo seguro, ya que ha seguido al dedillo todas las pautas marcadas por el resto de fabricantes, para acertar a la primera. En lo único que está un paso adelante es en calidad de acabado y robustez.



El morro tiene un aire al nuevo Touareg y ofrece un look robusto y compacto, el diseño lateral es muy parecido a los lideres del mercado, Isuzu D-Max o Toyota Hilux y la trasera también. Eso si la tapa de la caja pesa una barbaridad.

Gama
Por el momento la gama se limita a la carrocería de doble cabina con posibilidad de tres tipos de tracción, trasera, trasera con el eje delantero conectable con reductora y total permanente con reductora. Hay un motor de 2 litros diesel disponible con dos niveles de potencia, 122 y 163 caballos, este último biturbo. Hay tres acabado, básico, Trendline y Highline.

Motor
Hemos probado la versión tope de gama con el motor Biturbo de 163 cv. El Bloque es el mismo que montan los Passat o Golf de 2 litros TDi, pero con muchas modificaciones para adaptarse a las necesidades del Amarok. En este caso tiene un doble turbo que mejora la respuesta en todo el abanico de revoluciones, pero aún así no tiene los bajos que ofrecen los vetustos motores de 3 litros de algunos de sus competidores.



Su gran baza es el consumo, durante nuestra prueba, incluido una ruta en 4x4 el bueno del Amarok consumió 8,6 litros a los cien kilómetros, cifra que mejora en un par de litros a su más cercano competidor.

Las prestaciones son buenas, pero siempre penalizadas por unas primeras marchas cortas, pensadas para cargar peso en la caja, que es el objetivo final del Pick.up.



Nuestra unidad de pruebas montaba la tracción trasera con la posibilidad de acoplar el eje delantero y reductora. Aunque Volkswagen la llame 4motion no tiene nada que ver con la que montan los turismos, ya que es muy parecida a la utilizada en el resto de pick-up del mercado, con sus limitaciones y torpeza. Pensamos que las versiones con tracción total permanente podrían ser una mejor opción.

Interior
El interior del Amarok, sin estar al nivel de sus hermanos de gama, es muy superior a la competencia, tanto en calidad, como en diseño y funcionalidad, hay mucho espacio y la presentación es excelente.

Las plazas delanteras son soberbias, con una sujeción lateral y un confort elevado. El puesto de conducción es sensacional, con todos los mandos a mano y una fácil lectura de la información.



A lado del cambio de marchas y mediante un par de botones controlamos los modos de tracción de modo muy cómodo y sencillo.



Las plazas traseras y aunque tiene unas cotas amplias adolecen como en el resto de pick-up de un respaldo demasiado vertical.



La caja tiene una buenas medidas, con 1,55 metros de longitud, 2,5 metros cuadrados y una carga útil de cerca de una tonelada.





Comportamiento
El Amarok es el nuevo referente en cuanto a comportamiento en carretera dentro del segmento, ya que tiene un aplomo y agilidad muy elevado, tanto con la caja llena como vacía.



En Autopista se conduce muy fácilmente y es sencillo ver velocidades poco legales en el cuentakilómetros.

En zonas de carretera virada sorprende su buen hacer, sin apenas oscilaciones de la carrocería y un guiado fácil.



El gran problema de los pick-up son siempre las maniobras y el Amarok no es una excepción, necesita un montón de metros para girar y sus dimensiones exteriores tampoco ayudan a la hora de estacionar.

En ciudad es torpe y pesado, pero gracias a su correcta visibilidad nos podemos apañar con ciertas garantías.

En conducción Off-Road tiene un tarado de suspensión algo duro que provoca rebotes, pero la verdad es que puede llegar muy lejos sin muchos problemas.

Equipamiento
En el equipamiento Highline puede llevar equipamientos que otros pick-up ni sueñan, como la cámara de estacionamiento trasera, climatizador, columna de dirección regulable en altura y profundidad, varios tipos de llantas,…

Competidores
Los cocos del segmento en España con el Navara, L200 de Mitsubishi y el Hilux de Toyota, con precios parecidos al Amarok pero con una tradición mucho mayor que a día de hoy pesa mucho en la compra de este tipo de vehículos. Aunque no sea el más vendido a nosotros el Pick-up que nos parece más equilibrado es el D-Max de Isuzu.

Valoración Final
Nos ha sorprendido para bien el Amarok, aunque pensamos que Volkswagen podría haber mejorado el concepto pero e líneas generales estamos delante de un buen pick-up, que puede que veamos aparecer poco a poco por nuestras carreteras.


S, R y GS