La Ruta del Agua 2010

[DaniTTouareg]

Un viaje de mil millas comienza con un primer paso (Lao-Tsé)

Prólogo

Una vez más se nos presenta la oportunidad de escapar de la rutina diaria, del estrés del trabajo y de la gran ciudad. Sin esperarlo, sin buscarlo, de la noche a la mañana tenemos la oportunidad y decidimos desempolvar del cajón de los viajes uno de tantos de nuestra larga lista.

Nosotros que con nuestra libre elección preferimos ser viajeros a ser turistas, que preferimos ir a que nos lleven, que nuestro único límite en estos días es el tiempo que nos mide a todos por igual y el dinero que llevamos en nuestra cartera. Esa será nuestra única vara de medir, la que marcará nuestro destino y nos permitirá disfrutar de preciosos parajes o por el contrario nos prohibirá descubrir tanto otros. Con él tenemos que lidiar sin descanso para exprimirlo al máximo, él y solo él marcará nuestro destino en los próximos días.

¿Nos permitirá el tiempo cumplir nuestro objetivo?

Esta vez nuestro objetivo es cruzar España de Sur a Norte con nuestro Todoterreno, un Nissan Terrano II 2.7 Sport de estricta serie y con ruedas Toyo Open Country AT.

El itinerario que hemos elegido es parte de una de las rutas marcadas por los Romanos en el oeste peninsular o lo poco del trazado original que queda de ella, concretamente la calzada numero XXIV, popularmente conocida como “ La Vía de la Plata”.

Esta ruta sirvió para comunicar las grandes ciudades de Mérida (Emerita Asturica), ciudad fundada en el 25 a. C. por Octavio Augusto, para los soldados eméritos licenciados del ejército romano, de dos legiones veteranas de las Guerras Cántabras: Legio V Alaudae y Legio X Gemina y Astorga (Asturica Emerita) Nacida como campamento militar romano de la Legio X Gemina a finales del siglo I a. C.

Antes de llegar a Astorga y ya en la Provincia de Zamora nos desviaremos para coger el llamado, Camino Sanabrés para acabar en Santiago de Compostela.

Que no se echen las manos a la cabeza los puristas del camino si alguno cree que pretendemos hacer el Camino de Santiago en nuestro coche. Esto no pretende ser una peregrinación hacia Santiago, ya fui peregrino en el año 1999 haciendo el Camino Francés en bicicleta desde Sant Jean Pied Port hasta Santiago de Compostela, así que ya redimí mis pecados si alguna vez los tuve. Por lo tanto sé lo que sufre el peregrino en “su camino” y por ello les tengo respeto y admiración, sea cual sea el motivo de su penitencia.



Domingo 28 de Marzo
Barcelona – Salucar de Barrameda 1115Km
El reencuentro con los amigos

La noche ha sido corta. Nos han quitado una hora por el ajuste del horario de verano, nos hemos acostado tarde terminando mil detalles y el nerviosismo del viaje nos ha hecho dormir apenas cuatro horas, pero estamos apunto para afrontar el reto.

El coche ya lo tenemos casi todo cargado y las ilusiones están llenas a rebosar, así que partimos camino del Sur por las carreteras otras veces recorridas.

Paramos a desayunar en Hospitalet de l’Infant sobre las 11:00h, justo cuando estamos llenando el depósito recibo una llamada de Edu, nuestro anfitrión sureño que parece que hoy ha decidido madrugar.

Seguimos por la aburrida autopista con un soleado día. Pasamos Valencia, nos dirigimos a Córdoba, Sevilla y por fin al caer el día nos acercamos a Sanlúcar de Barrameda justo a tiempo de contemplar una de las mejores puestas de sol que se pueden ver desde esta parte de España, no podemos dejar de parar unos minutos para quedarnos ensimismados observando esta maravilla.



Ya de noche sobre las 22:00h llegamos a Sanlucar , nos reencontramos con Edu, su esposa Susi y su retoño Rocío (más lista que el hambre). Nos organizamos una rica cena y pasamos una agradable velada a pesar del cansancio y la falta de sueño.

Estamos realmente cansados del viaje y la falta de sueño, pero intentamos aguantar despiertos mientras conversamos con Edu.


Lunes 29 de Marzo
La sorpresa

A la mañana siguiente después de un obligado desayuno a base de tostadas con “manteca colorá”, dedicamos la mañana a visitar las instalaciones de “Talleres Salistre”, ojear el nuevo proyecto que Edu lleva entre manos y a preparar en secreto la sorpresa que le tenemos preparada a Mari.



La mañana transcurre entre llamadas de teléfono, el deambular por las calles y las visitas a los lugares pintorescos de Sanlucar.

Ya después de comer y con todo arreglado nos dirigimos a un picadero del pueblo y es en ese momento cuando Mari se da cuenta de que le hemos preparado un precioso paseo a caballo por la playa de Sanlucar. Una de sus ilusiones desde antaño.

El paseo es realmente agradable y bonito, todo un lujo poder montar a caballo por esas playas con la incipiente puesta de sol y el Parque Nacional de Doñana al fondo con sus preciosas dunas muriendo en el mar.





Ya después del paseo nos despedimos de Edu y su familia y nos dirigimos a nuestro próximo destino y lugar para pernoctar: Santiponce.

La idea de comenzar nuestra aventura en la Catedral de Sevilla es desechada por ser fechas de Semana de Santa y ser imposible la circulación por el centro de la población, así que decidimos comenzar en Santiponce, localidad cercana a Sevilla y primer asentamiento Romano importante.

La autopista nos acerca hasta Sevilla. Ya entrada la noche cruzamos la ciudad por sus congestionadas y laberínticas rondas, seguimos el dictado del navegador sin saber muy bien por donde nos lleva y cambiamos de carril automáticamente desorientándonos continuamente pero con la confianza de que las nuevas tecnologías suplen nuestra falta de conocimiento de la ciudad y sus trazados.

Certeramente, el navegador nos conduce a la entrada de la población de Santiponce. Nada más llegar buscamos un lugar donde dormir y lo hallamos en el Hotel Anfiteatro Romano, justo delante de las puertas de Itálica.

Martes 30 de Marzo
Santiponce – Fuente de Cantos 140Km
“Pasápadentro”



Después del obligado desayuno de tostadas con manteca y un café nos dirigimos andando a visitar las ruinas de Itálica.

La entrada al recinto es gratuita y el portero después de censar nuestra procedencia y darnos los tickets de entrada nos invita a entrar con gracioso “pasápadentro”

El conjunto arqueológico de Itálica, es el asentamiento romano más antiguo de la península. La ciudad de Itálica fue fundada en el año 206 a. de C. por el general Publio Cornelio Escipión para establecer en ella a los soldados heridos que habían luchado contra los cartagineses en Ilipa, lugar donde actualmente está ubicado el pueblo de Alcalá del Río. El nombre de Itálica proviene de la patria de origen del general Escipión, Italia, y en un primer momento la ciudad tuvo el rango jurídico de Vicus Civium Romanorum. El estado de conservación es excelente, se pueden ver con toda claridad la distribución de las casas, las replicas de lo mosaicos en el suelo de las mismas, las grandes termas y su espectacular anfiteatro con capacidad para 25.000 espectadores te hace sobrecoger al pisar su arena e imaginar el recinto repleto de gente.







Tras una hora y media de visita cogemos el coche y comenzamos nuestra aventura offroad. La pista que viene desde Sevilla es el camino de mantenimiento de Emasesa, la pista es buena, pero las últimas lluvias la han convertido en un barrizal lleno de roderas. Esta será la tónica general de nuestro viaje, el agua, el barro, las roderas y los vadeos. Unas veces los sortearemos con destreza y en otras ocasiones nos obligarán a dar la vuelta para buscar pasos alternativos.

A los pocos metros de comenzar la pista ya encontramos el primer peregrino caminando en la soledad de su trayecto. Coincidimos con el en un vadeo que no nos presenta ninguna complicación.



Unos cuatro kilómetros más adelante llegamos al primer punto complicado del día, el famoso vadeo del arroyo Molinos. Generalmente está seco o por lo menos practicable en vehiculo, esta vez lo que nos temíamos a juzgar por la cantidad de barro que vamos encontrando se torna en cruda realidad. Una Renault Express abandonada y cubierta completamente de barro después de haber sido arrastrada días atrás por la corriente nos alerta de la suerte que corremos si intentamos cruzar ese pequeño vado.





Después de valorar las opciones que tenemos decidimos probar suerte por otro camino paralelo unos centenares de metros más al oeste, pero el paso está peor si cabe que el del arroyo Molinos, así que decidimos ir a buscar la carretera para sortear el rio.

Por ella llegamos a Guillena y enlazamos otra vez con nuestra senda.

La cañada real a la salida de la población nos acerca a nuestra primera dehesa. Realmente es paisaje es precioso el circular entre encinas y alcornoques. El camino nos sorprende en cada giro, la pista está bien marcada, vamos pasando algunas cancelas, tenemos algún error de navegación, pero vamos encontrando el camino sin problemas.



De repente lo que era un camino perfectamente transitable se convierte en un paso pedregoso sin dificultad, pero algo estrecho.







Lo pasamos sin problemas, pero el camino ha cambiado radicalmente, se torna estrecho con algunas grietas hechas por el agua. La maleza cada vez lo hace más angosto y en un paso notamos como el diferencial roza en el suelo aunque la inercia que llevamos permite que pasemos sin apenas darnos cuenta.



Unos metros más adelante paramos para inspeccionar a pie como sigue el camino.

Poco a poco el camino se va cerrando, demasiado para un vehiculo, aunque luego más adelante vuelve a abrirse, decidimos recular y coger una pista que va paralela y se une a nuestro camino unos metros más adelante. Mientras maniobramos marcha atrás hasta encontrar un lugar donde dar la vuelta llegamos al lugar donde rozó el diferencial y el coche deja de avanzar. Intentamos rectificar la trazada pero ya es tarde, el coche no avanza en ningún sentido, las maniobras son inútiles y solo hacen que la rueda derecha delantera se hunda cada vez más en el húmedo terreno dejando el coche escorado del lado derecho y apoyado solo en el protector delantero y el diferencial trasero.



Encontramos unas estacas de madera abandonadas de algún cercado y las utilizamos a modo de pala para liberar el coche y también para calzar las ruedas. En esos momentos aparecen dos chicas peregrinas que se ofrecen a echarnos una mano, así que después de quitar toda la tierra que podemos, enganchamos una eslinga y mientra Marí se pone al volante nosotros tres intentamos estirar del coche, pero el esfuerzo en inútil, el diferencial trasero sigue clavado y no tenemos posibilidades de sacar el coche, así que decidimos ir en busca de ayuda. Abandonamos momentáneamente a nuestro compañero en tan deshonrosa situación y retrocedemos andando sobre nuestros pasos.





Las peregrinas nos han comentado que han visto un tractor arreglando el camino, así que retrocedemos sobre nuestros pasos en busca de ayuda. Al poco rato vemos que el camino está siendo aplanado por una maquina pero no la vemos, así que seguimos andando en busca de la maquina. El sonido de un motor a lo lejos nos va guiando pero no conseguimos verla. Llegamos a una Planta de reciclado y pensamos que ahí tenemos alguna opción de ayuda, pero una valla metálica que limita el linde de la finca donde nos encontramos nos impide llegar hasta la fábrica. Vamos siguiendo el trazado de la valla hasta que encontramos un hueco por donde poder sortearla.

Una vez pasado al otro lado conseguimos a través del personal de la fábrica que venga un señor con una Pick-up que muy amablemente nos llevará hasta donde tenemos el coche.

Manolo de apodo “el chatarrero”, es un jubilado de Guillena que pasó muchos años trabajando en Holanda de mecánico. Al llegar a cierta edad quiso volver a su pueblo natal, pero su mujer y sus hijos quedaron en Holanda, no le quisieron seguir. Esas heridas que no se curan siguen sangrando en la conversación de este amable hombre que sigue trabajando pese a estar jubilado por que le gusta lo que hace y así ayuda a los amigo. Además de ser fundador de una cofradía de Guillena, lo cual nos explica orgulloso y con voz entrecortada debido a la emoción que le produce el solo hecho de explicárnoslo. Esta es la conversación que vamos manteniendo mientras intentamos reencontrar el camino donde tenemos el coche encallado.

Hemos entrado en la finca por un camino diferente y me tengo que orientar solo con la intuición. Manolo nunca ha estado por estos caminos, es una finca particular y no puede creer por donde nos hemos metido con el coche.

Al llegar al paso estrecho le digo que ponga las cortas, el me mira sorprendido, nunca le han hecho falta, es más, no tiene muy claro como hacerlo, está perplejo,  incrédulo de por donde está pasando su coche y no alcanza a comprender como hemos pasado por aquí. Unos metros más adelante llegamos a nuestro coche, enseguida saco una eslinga y con un leve tirón ya tenemos a nuestro amigo libre otra vez.



Al sacar el coche y revisar donde nos hemos quedado atrancados comprendemos que hubiese sido imposible el salir por nuestros propios medios





Le damos la vuelta a los dos coches y comenzamos el retroceso para coger la pista paralela.

Al llegar al cruce de caminos nos despedimos de Manolo. Nos invitamos mutuamente a vernos en otra ocasión que visitemos el pueblo o el azar de la vida cruce nuestros caminos, esas promesas que sabes que es imposible o muy poco probable que nunca se produzcan, pero que por algún extraño motivo salen del corazón y se dicen con la misma sinceridad que si se fuese a producir a la semana siguiente.



Es una buena hora para hacer algo de comer, así que aprovechando la parada sacamos los bártulos y enseguida preparamos un picnic, café incluido.

Seguimos en camino elegido y por unos centenares de metros la ruta sigue sin ninguna dificultad. Ilusos de nosotros pensamos que podremos proseguir sin problemas, pero no será así.

El camino vuelve a convertirse en sendero, las grietas lo siguen vertebrando una y otra vez, con la experiencia que acabamos de tener extremamos las precauciones, cada vez estamos más alejado de Guillena y por ende cada vez tenemos menos posibilidades de ayuda.  Por fin, después de un paso cerrado  por la maleza, en subida y con algún escalón salimos a un cruce da caminos. Estamos al lado de una casa, el camino sigue en sendero, nos adentramos en él pero se cierra demasiado. Mientras yo bajo del coche para seguir andando, Mari se dirige a la casa con cautela ya que el salen al paso dos grandes perros en defensa de su territorio.

En el sendero me encuentro un peregrino bicicleta al hombro intentado sortear como puede las grietas y el barro, está claro que el coche no podrá pasar por aquí.

Mientras Mari está hablando con la dueña de la casa, que le confirma lo que yo acababa de ver, que el camino por ahí ya es imposible y que es la primera vez que ve salir un coche de donde nosotros hemos venido. Nos invita a salir por el camino que da acceso desde su finca hasta la carretera.

Nuestro siguiente punto será encontrar la entrada a la finca “El Berrocal” y poder hacer el cerro del Calvario. Cuando llegamos a la finca, el acceso está cerrado, solo es posible andando o en bici, así que seguimos por carretera hasta Almadén de la Plata.

En Almadén de la Plata volvemos a tener los mismos problemas, el camino sigue por fincas particulares que nos van cerrando el paso a cada intento que hacemos. En un tramo logramos hacer algunos entre fincas, pero finalmente el Arroyo Mateos que divide las provincias de Huelva y Sevilla nos cierra el paso con su desmesurado caudal. Una vez más debemos retroceder sobre nuestros pasos y coger carretera hasta El Real de la Jara.  
  
El Real de la Jara es el último pueblo de la provincia de Sevilla, ha partir de aquí entramos en Extremadura. El camino cambia radicalmente y nada más salir del pueblo encontramos una pista con buen firme, buena señalización de la vía y las ruinas del Castillo de las Torres.
 

 
Entramos en plena zona de dehesa, el camino de buen firme circula entre fincas particulares y vamos divisando ganado, cerdos ibéricos, etc… Los paisajes nos abruman, miremos donde miremos el color predominante es el verde, el agua está siempre presente en la ruta, la tierra está húmeda, en esta zona las roderas no presentan ninguna dificultad, las cancelan que acotan las propiedades ralentizan nuestro paso por el gran número de ellas que nos vamos encontrando.





Al atardecer llegamos a Fuente de Cantos, nos alojamos en el hotel La Fábrica.  Se trata de un hotel construido aprovechando las instalaciones de una antigua fábrica harinera. Es muy curioso pasear por el hotel viendo la antigua maquinaria de la fábrica perfectamente conservada, además dispone de Pub y cine.

Después de recuperarnos en el hidromasaje salimos a cenar al pueblo. La cena es de menú y comprobamos la calidad de los alimentos, mucho mejor de lo que solemos encontrar en los menús de las grandes ciudades. El día ha sido largo y nos acostamos pronto que mañana toca madrugar.

Miércoles 31 de Marzo
Fuente de Cantos – Cañaveral 260Km
“Los vadeos interminables”


 
A las 6:00h suena el despertador, después de acicalarnos salimos del hotel camino del restaurante donde cenamos anoche. Al maniobrar el coche noto como la dirección está demasiado dura, al principio pienso en alguna rotura, pero al bajarme para inspeccionar veo que tenemos una rueda pinchada.

Después del obligado desayuno de tostadas con manteca, está vez con hígado, zumo de naranja y café nos vamos a reparar el pinchazo. Después de desmontar la rueda y para sorpresa nuestra, la rueda no está pinchada. Se trata de la rueda derecha que ayer quedó enterrada cuando nos quedamos atrancados y al parecer debido al roce de una piedra ha marcado la llanta y pierde algo de aire, como no tenemos posibilidad en este pueblo de reparar con soldadura de aluminio, reparamos con una masilla epoxi esperando que aguante y colocamos la rueda de recambio.

Entre tanto se va secando la masilla nos acercamos al hotel para recoger el equipaje he ir adelantando tiempo.

Una vez todo listo nos ponemos en ruta. Como cada día, al principio cuesta un poco encontrar la buena senda, las salidas de los pueblos son siempre algo enrevesadas. Esta vez los caminos son buenos, pero nada más empezar la pista que seguimos nos conduce a un campo sembrado al lado de la carretera, el paso en estrecho y el coche apenas cabe, cuando encontramos de nuevo el camino vemos un letrero escrito por un peregrino con la palabra “Agua”, no acabamos de entender muy bien el significado y no sabemos si se refiere a que hay una fuente para poder cargar agua o es que por el contrario hay un paso con agua y es una aviso para no hacer el camino en balde. Como llevamos la ventaja de ir en coche nos adentramos por las rodadas y unos centenares de metros más adelante nuestras dudas se despejan en forma de arroyo desbordado.



Después de inspeccionarlo a pie tenemos claro que debemos retroceder, el fondo fangoso y la profundidad del arroyo nos desaconsejan intentar atravesarlo.

Volvemos a la carretera y circulamos por su arcén unos metros hasta volver a encontrar el buen camino. Seguimos circulando por pistas de buen firme y trazado durante media hora hasta que tras pasar un cruce de caminos otro vadeo nos hace detenernos.



Después de la obligada verificación pasamos sin problemas y seguimos circulando y disfrutando de los paisajes.

Llegando a Zafra nos sorprenden los pasos a nivel sin barreras, llegando a haber tres vías de tren continuas sin más señalización que unas viejas y desfasadas señales de paso a nivel.



La salida de Zafra se nos hace un poco complicada, después de callejear por la ciudad, el camino toma dirección norte y nos lleva por unos caminos traseros de unas casas que poco a poco nos conducen a la parte trasera de una explotación ganadera convirtiendo el camino en un vertedero de negros residuos líquidos que preferimos no pararnos a pensar de que se tratan. Enseguida salimos de las influencias de la ciudad y el paisaje se torna diferente. Una larga pista de tierra rojiza entre vallas oxidadas se presenta ante nuestros ojos.

Siguiente destino Los Santos de Maimona al cual llegamos sin problemas. Un bonito y encalado pueblo que también nos paseo por sus laberínticas calles de las cuales destacan sus balcones y rejas de forja negras que contrastan con las blancas fachadas. Nos llama la atención a la salida del pueblo y en su parte más alta la bonita iglesia  de Nuestra Señora de los Ángeles edificio gótico renacentista del Siglo XVI en cuyo altar hay un cuadro de Francisco de Zurbarán.



Nuestro siguiente paso es Vilafranca de los Barros, con la cantidad de agua que estamos encontrando, el nombre ya nos pone sobre aviso. El camino no presenta dificultades y cuando a lo lejos divisamos el pueblo y creemos tenerlo al alcance de la mano, la autovía nos corta el paso y tenemos que buscar alternativa circulando entre los campos de cultivo. Parece que ya tenemos la buena senda y el camino circula paralelo a la autovía hasta que el canal fluvial que drena la carretera nos corta el paso una vez más.



Otra vez tenemos que retroceder sobre nuestros pasos  y volver a buscar un paso alternativo al canal.

Hacía el medio día llegamos a Mérida.

Una ciudad como esta requiere al menos dos días para visitarla medianamente, desgraciadamente no disponemos de ese tiempo y tras una breve parada en el acueducto de los milagros, continuamos camino y hacemos una parada para comer en las afueras en el embalse de Proserpina.






Tras la breve parada para el ágape el camino entra en una zona de dehesa. Al principio el camino es algo angosto y con algunas piedras pero fácilmente transitable.



Y encontramos el primer cruceiro del camino.



Tras continuar camino entramos en el Parque Natural de Cornalvo. A la entrada vemos un grupo de peregrinos ciclistas que están parados con la Guardia Civil la cual le están tomando los datos. Paramos y entablamos conversación con dos chicos del norte con los que habíamos coincidido en el embalse, cuando nos toca el turno a nosotros y con la idea de que no nos dejarán pasar, el Guardia asiente con la cabeza a mi mirada y seguimos camino por uno de los parajes más bonitos de todos los que llevamos transitados.







A la salida del Parque Natural nos encontramos con el primer Miliario autentico del camino, en Miliario XVIII



Llegar hasta él no es fácil, el campo está saturado de agua y el coche se hace ingobernable, por no hablar de las roderas que amenazan con detener nuestra progresión en cualquier momento. Aprovechamos una de las veces que el camino cruza la carretera para proseguir por ella y nos paramos en el arcén paralelos al miliario. Al detener el coche notamos como las ruedas derechas se hunden en el barro, bajamos y nos acercamos al miliario para sacar unas fotos. Nos parece que un monumento tan importante como este no puede estar abandonado de esta manera en este paraje.



Al volver al coche no lo podemos sacar las ruedas en el fango hacen que nos hundamos, engrano las cortas y logramos salir marcha atrás.

Enseguida dejamos la carretera volvemos a enlazar caminos negados por el agua y roderas. Al subir a una loma se vuelve algo roto.



Llegamos a Cáceres ya caída la tarde. La ciudad está totalmente colapsada por la Semana Santa, los primero intentos de buscar alojamiento son en vano, todo está completo. Conseguimos una habitación en un hotel céntrico pero el precio nos parece desorbitado, la poca oferta disponible nos hace dudar por un momento pero optamos por salir de la ciudad y dirigirnos a Casar de Cáceres por carretera, siguiente pueblo en la ruta.

Casar de Cáceres tampoco dispone de oferta hotelera tan solo una Casa Rural de calidad media-alta en la cual probamos suerte ya con la noche caída. Tampoco tenemos suerte y nos confirman lo que nos vienen diciendo desde Cáceres, que no hay oferta en la zona, que están completos.

Hacemos un par de llamadas y localizamos una habitación en un hostal de Cañaveral, así que allí nos dirigimos por carretera.

El hostal en cuestión es el Hostal Málaga, curioso lugar repleto de vestigios del pasado y de las gentes del pueblo que inundan de humo todo el Bar del hostal mientra ven un partido de futbol en televisión. El dueño muy amablemente nos acomoda en las habitaciones que tiene en la parte de arriba del edificio, sencillas pero limpias y con calefacción, después nos invita a que dejemos el coche encerrado en su cochera, gesto a agradecer cuando viajas con la casa a cuestas.

Después de refrescarnos un poco y acondicionarnos bajamos a ver si tenemos posibilidad de cenar alguna cosa. No hay problema, enseguida nos preparan una mesa en el comedor y en pocos minutos estamos cenando. Curiosa sensación la que tenemos en estos momentos de comer en un comedor totalmente vacío, pero por otra parte ya nos resulta hasta familiar pues nos suele ocurrir a menudo en este tipo de viajes.

Jueves 1 de Abril
Cañaveral – San Pedro de Rozados 193 Km
“Cáparra y la via Romana”



El despertador vuelve a sonar temprano y después del desayuno no aprovisionamos de agua, aprovechamos un cajero de “La Caixa” que sorprendentemente encontramos en este pueblo hoy en fiestas y partimos a continuar con nuestra ruta.

El inicio comienza en una fuerte subida empedrada en la cual tenemos que engranar la reductora, poco a poco el coche va subiendo perfectamente por este empinado trazado, algunas grietas nos hacen ir rectificando la trazada sin posibilidad de error, si el coche se para aquí no creemos que tengamos tracción para salir y la maniobra de retroceso sería complicada por el desnivel del camino. Al llegar arriba un precioso bosque en un soleado día nos ofrece una espectacular estampa, es temprano todavía y hace frío.



Enseguida nos volvemos a encontrar con  la autovía que trunca nuestro camino, retrocedemos en unos centenares de metros c por la calzada dirección a Cañaveral y volvemos a encontrar nuestra senda en un cerrado camino en la parte trasera de un restaurante. Tras pasar la cancela entramos en una finca particular, no dejamos de sorprendernos con la espectacularidad de las dehesas que atravesamos, rodeados de naturaleza por donde quiera que miremos.

La finca particular por la que rodamos está seccionada por pequeños riachuelos que truncan nuestro camino por la corta altura libre de nuestro coche, pero poco a poco y con ayuda de piedra y otros objetos que encontramos en el camino logramos sortearlos.







La salida de esta finca es algo estrecha y el coche apenas cabe por su cancela, buscamos alternativa, pero la única forma es retroceder todo el camino cosa que no vemos viable, nos ha costado bastante llegar hasta aquí para tener que dar la vuelta, así que probamos suerte y plegando los espejos conseguimos pasar si rozar la chapa. De frente tenemos otra igual solo que el riachuelo que la atraviesa es demasiado profundo para nuestro coche, así que seguimos por asfalto hasta el siguiente pueblo.

El enlace con la vía nos cuesta un poco, al final lo encontramos al entrar en una finca particular. Otra vez el mismo ritual, abre cancela, pasa, cierra cancela. Vamos siguiendo las roderas y nos quedamos ensimismados con el paisaje, esta es con mucho una de las más bonitas fincas que hemos tenido la suerte de pasar.



Ensimismados por el espectáculo nos pasamos el cruce del camino y seguimos por la pista. Un par de kilómetros más adelante termina nuestro avance en una casa. El dueño sale y muy amablemente comentamos sobre la ruta que estamos haciendo y nos indica el camino correcto a seguir pero advirtiéndonos de que no podremos pasar con el coche ya que es un sendero. Agradecemos sus explicaciones y volvemos sobre nuestros pasos, al llegar al cruce nos bajamos para inspeccionar y evidentemente como ya nos habían advertido, el camino prosigue por una senda solo practicable a pie o en bicicleta. Aprovechamos  la belleza del lugar para hacer unas fotos y disfrutar del paisaje y volvemos sobre nuestros pasos hasta la carretera.



Por el camino de vuelta nos volvemos a cruzar con el ganado que pasta a su antojo y nos miran con esa mirada tranquila del que todo lo tiene hecho y no tiene de que preocuparse ni que temer y siempre nos preguntamos ¿toro o vaca?



Proseguimos la ruta por carretera rodeando la finca, el asfalto nos eleva a lo alto de la montaña y reencontramos nuestra senda a la salida de la finca pero por la parte opuesta de nuestra entrada, allí la vía se convierte en cañada real y se observan perfectamente las delimitaciones de la misma. El terreno se vuelve otra vez anegado por el agua y debemos extremar las precauciones para no quedarnos enganchados.



Hacia las 14:00 de la tarde llegamos a Cáparra, uno de los puntos álgidos de esta ruta, famosa ciudad romana de la cual solo queda en pie su arco pero que está en proceso de reconstrucción. Paramos y hacemos una visita al centro de interpretación donde se puede ver como fue la ciudad y los restos de la misma.



Tras la parada continuamos por la vía volviéndonos a encontrar con numeroso vadeos de oscuras pero limpias aguas que nos hacen temer lo peor en cada uno de ellos.



En un punto en concreto la vía se funde con la carretera, seguimos expectantes el próximo cruce que nos lleve de nuevo al camino, como suele pasar lo vemos justo en el momento en que nos los pasamos y no hay opción para dar la vuelta, así que continuamos unos centenares de metros más hasta encontrar un lugar idóneo para dar la vuelta, de repente en ese momento vemos un solitario restaurante en medio de ningún sitio, se hace el silencio en el coche, nos miramos y una carcajada al unísono confirma que paramos a comer. El local en cuestión es un asador donde reponemos fuerzas a base de sopa castellana y carne a la brasa.

Nuestro siguiente punto importante es la llegada a Bejar, la subida es por carretera pero al llegar al pueblo el paso del puerto lo hacemos por la vía original romana unos de los pocos metros de vía que se pueden pisar en todo el camino.



Tras retomar de nuevo la senda llegamos a la Calzada de Bejar un pintoresco pueblo con construcciones muy típicas cuyos balcones desafían la gravedad pese al paso de los años.







A la salida del pueblo el camino se vuelve estrecho y enfangado, llegamos a una zona de dehesa en la que aunque siguen los grandes charcos, el firme es bueno y el camino ancho. En esta zona existen varios miliarios que pese a no estar cuidados se mantienen en buen estado. En una de las paradas observamos las montañas nevadas en el horizonte.



Un poco más adelante un nuevo cartel nos avisa de la existencia de “Agua”, seguimos para observar el obstáculo y el Rio Sangusín nos corta el paso sin posibilidad de vadeo en vehiculo, ni tan solo en bicicleta. Unas piedras a modo de mojones es la única forma de poder salvarlo a pie y para los más valientes que no les importe caer en sus frías aguas.

Esta es una imagen de la web, cuando nosotros llegamos las piedras apenas asomaban del agua.



Una vez más nos vemos obligados a retroceder sobre nuestros propios pasos y tomar asfalto hasta llegar a Peromingo.

El camino sigue por una cañada real una vez pasamos el pueblo de Fuenterroble de Salvatierra. Una inmensa planicie se abre delante de nuestros ojo con un alto cerro como objetivo, el camino está delimitado a ambos lados por el cercado de dos campos y esto dibuja una perfecta, verde, anegada y verde alfombra recta salpicada de infinidad de embarradas roderas que vamos sorteando como mejor sabemos a una moderada velocidad que hace que el agua nos salpique todo el parabrisas de vez en cuando teniendo que activar el limpiaparabrisas para recuperar la visión perdida durante unos instantes. Como no podía ser de otra forma, después de circular por esta alfombra durante 4.5km un nuevo arroyo desbordado nos vuelve a cortar el camino. Hay un puente de piedra, pero es demasiado estrecho para nuestro coche, así que tras intentar sin éxito buscar un paso alternativo debemos darnos la vuelta para volver al asfalto.



Rodeamos este nuevo paso infranqueable por carretera y subimos al Pico Dueñas (1.172mts), el punto más alto de la Vial de la Plata entre Sevilla y Astorga.



Después de admirar el paisaje volvemos a bajar, han pasado las 19:30h es hora de buscar donde dormir y por lo que venimos observando durante toda la tarde esta zona no ofrece demasiada oferta hotelera. Llegamos a San Pedro de Rozados y a encontramos una habitación en una casa particular. Después de descargar el coche salimos a dar una vuelta por este pequeño pueblo antes de que anochezca.

El “albergue oficial” está desatendido así que una vecina ha creado uno particular además de un pequeño restaurante. Cenamos algo ligero, hacemos algunas anotaciones y nos vamos a descansar que el día de hoy ha sido largo.

Viernes 2 de Abril
San Pedro de Rozados – Rio Negro del Puente 291 Km
“El desvío”



Como cada mañana nos levantamos temprano, hoy es más temprano si cabe, estamos en una casa particular y hay que procurar ser los primeros en el baño para no demorar nuestra salida. Después de acicalarnos, pagamos la habitación y bajamos al coche, este está cubierto de escarcha helada, el agua que tenemos es el coche está casi congelada, nos dirigimos al restaurante y hacemos un desayuno ligero mientras que charlamos con algunos peregrinos ciclistas que están apunto de comenzar la ruta del día.

Partimos por una pista ancha sin complicación que nos acerca rápidamente a Salamanca. La entrada a la ciudad se hace tras cruzar una rocosa loma con una cruz en honor a un peregrino muerto en ese lugar. El paraje está repleto de piedras amontonadas marcando el lugar, entiendo que en honor al difunto.





Tras bajar a la ciudad y atravesarla rápidamente seguimos avanzando por extensas llanuras y circulamos paralelos a la antigua via del tren abandonada que llevaba a Zamora.



La ruta por la mañana es bastante rápida, las pista no presentan complicaciones, tan solo un encontramos un tramo bastante roto que nos hizo buscar una alternativa ya que el terreno era blando.



Hacía las 13:15 llegamos a Zamora donde paramos al lado del rio a tomar un bocado rápido y estirar algo las piernas.

Proseguimos cruzando la ciudad lo más recto posible. A la salida de la ciudad, los caminos van cambiando continuamente de estado, vamos combinando buenas pistas de ancho y seco firme con caminos anegados entre campos y algún enlace por carretera ante al imposibilidad de circular por las sendas o simplemente por que el negro asfalto se ha tragado la via.



Hacia las 15:00 paramos a comer en un bar típico de la zona, bueno típico por que lo comentan las guías por que de modo propio no creo que nadie parase a comer en este lugar, pero son de los que te sorprenden y los dueños muy atento nos agasajan con lo que tienen.



En el bar coincidimos con un peregrino que está comiendo y nos sentamos a su mesa. Al principio se muestra distante por nuestra forma de viajar, él lleva cinco años seguidos haciendo el Camino de Santiago por la Via de la Plata caminando, cosa de elogio desde luego. Poco a poco a medida que vamos conversando se va relajando y la conversación entra en una fase distendida donde acabamos contando anécdotas y consejos de cómo proseguir con la ruta sin ni siquiera conocer nuestro nombres, después del café una foto de despedida.



Tal y como teníamos previsto y como habíamos confirmado con el peregrino y el dueño del bar, al llegar a Granja de Moreruela abandonamos la Via de La Plata para tomar el camino Sanabrés. Este es el punto de desvío



Este giro de 90º hacia el Oeste hace que el paisaje cambie radicalmente y entremos de llenos en la parte más salvaje de Zamora, en la Sierra de la culebra y el vale de Sanabria. Incluso circulando por esas pistas se nos cruza un ciervo.



Al llegar a Santa Marta de Tera podemos observar la figura más antigua que se conserva de Santiago



A la salida de la población el camino discurre paralelo al río entre pistas de cantos rodados. La tarde comienza a echarse encima son las 18:30 y paramos para confirmar la ruta con unos vecinos que están en un banco sentados aprovechando el único sitio del pueblo donde todavía se reflejan algunos rayos de sol.



A la salida del pueblo entramos en una pista muy cerrada entre dos campos, a la izquierda tenemos un talud de un metro de altura y a la derecha un escalón de la misma altura, los arbustos cierran el camino y este está muy embarrado, demasiado embarrado, no tenemos más posibilidades de seguir adelante, la situación no nos gusta, según el mapa todavía tenemos un largo camino hasta el siguiente pueblo, ya es demasiado tarde y tal y como vemos el panorama el avance va a ser lento. Seguimos adelante, las ramas van rayando el coche hasta que llega un punto que ya no es posible continuar sin hacer un destrozo, paramos y continuo durante un rato andando entre el barro, la cosa no se pone mejor, así que decidimos seguir marcha atrás hacia el pueblo ya que no tenemos ninguna posibilidad de darle la vuelta al coche. Las maniobras rectificando la trazada son continuas y con el miedo de quedar encallados, al fin encontramos un campo al cual podemos acceder a dar la vuelta y salimos de ese atolladero.

Hacemos el intento unas par de veces más por otras pistas, pero es en vano estamos en las inmediaciones de un embalse y eso hace que tengamos que rodearlo. Al final cogemos carretera y llegamos a Rio Negro del Puente.

En esta localidad existe un albergue de peregrinos y nos invitan a quedarnos pero declinamos la oferta, no nos parece honesto el hospedarnos en el albergue viajando en coche.

Seguimos en busca de un lugar donde dormir, la noche ya se ha echado encima, recorremos los hoteles y hostales de la zona y de varios pueblos de alrededor sin éxito, estamos en Viernes Santo en plena Semana Santa y el lleno el al cien por cien. Ya es muy tarde, así que decidimos volver a Rio Negro del Puente y tras comprobar que el albergue sigue teniendo 20 camas libres nos alojamos en él.
 

Sábado 3 de Abril
Rio Negro del Puente – Verín  227 Km
“El homenaje”



Nos levantamos temprano, la noche en el albergue me ha hecho recordar mi viaje del 99 ese ambiente de peregrinos, de silencio para no molestar a los que descansan, el olor a mentol de ungüentos para aliviar las destrozadas piernas, las mochilas y los sacos de dormir al lado de las literas y las caras de cansancio quemadas por el sol y cortadas por el frío.



Desayunamos algo en el único bar del pueblo que hay abierto y salimos dirección Mombuey a comprar algo de pan y lomo para la comida.

A la salida de Mombuey enlazamos de nuevo con el camino, que nos lleva entre pistas embarradas y asfaltadas hasta Cerdanilla y a rodear el Embalse de Cerdanilla.

Durante la primera parte de la mañana no se nos da muy bien la ruta, los caminos están muy embarrados, hay agua por todas partes y la orografía del terreno es muy abrupta con fuertes subidas y bajadas que los hacen intransitables, así que vamos alternando tramos de asfalto hasta llegar a Puebla de Sanabria.





Allí cogemos la carretera que sube al lago y visitamos dos de sus playas.

Ya de vuelta del lago entramos en Puebla de Sanabria, nos sorprende la cantidad de gente que hay visitándola, está completada saturada y volcada en el turismo, perdemos la senda debido a la cantidad de coche que hay, no vemos las marcas y buscamos una y otra vez el camino que lo tenemos delante nuestro y no somos capaces de verlo. Aparcamos el coche para realizar la búsqueda a pie y rápidamente la localizamos, atravesamos el pueblo y salimos por su parte oeste, el camino sigue en sendero y en una fuerte pendiente, así que hacemos unos kilómetros en paralelo por la carretera hasta que encontramos una pista de enlace con el camino.

El barro está asegurado, las cancelas para el ganado se suceden y pronto llegamos a Terroso donde seguimos camino por unas pistas que rápidamente nos elevan hasta casi los 1200mts, pero de repente la pista está cortada por el dueño de una finca.



Vamos haciendo intentos en las pistas que suben a la montaña pero claramente vemos en el mapa que no tienen salida, el pico Cabril de 1850mts nos lo impide y todas las pistas mueren a sus pies.



Bajamos de nuevo hacia el valle y continuamos camino hacia el puerto de Padornelo. En un cruce de caminos vemos como sale a nuestra izquierda una pista que asciende hacia las nevadas cumbre y no podemos reprimir nuestro incansable instinto de saber que hay más allá, así que por un momento abandonamos nuestra ruta en busca de lo desconocido. Ascendemos hasta que el sentido común nos dice que ya está bien para ir solo, sin cadenas y con ruedas de carretera.



Al regresar paramos a comer en el restaurante que hay en el Puerto de Padornelo, la comida es buena y abundante, pero los precios no están en consonancia con nuestro presupuesto.

Seguimos camino después de ágape y llegamos a Aciberos por carretera, atravesamos el pequeño pueblo y entramos en una estrecha pista de bajada, el terreno está húmedo y cubierto por muchas hojas en una bonita estampa.



Poco a poco se va cerrando pero observamos algunas huellas de coche, así que de nuevo bajamos para ver como continúa ya que no hay espacio para poder dar la vuelta. Una vez reconocido el camino vemos que este continúa hasta el río y salvo algunas piedras que nos podrían enganchar no vemos más dificultades, así que decidimos seguir adelante.





Al llegar al puente del río comenzamos la subida, la pista sigue siendo del mismo estilo pero no presenta dificultad, atravesamos un túnel de ferrocarril y tras pasarlo la pista se convierte en sendero, así que nos toca dar la vuelta hasta el túnel y coger otra pista que nos llevará a la carretera de Hedroso.

Cuando llegamos, la ruta sigue por asfalto, al llegar a Ocañizo encontramos que está nevando con fuerza, pero sin llegar a cuajar.



A partir de ahora y para el resto de la jordana la ruta sigue completamente por asfalto salvo algunos pequeños tramos de camino sin importancia que dejan la carretera para volverla a tomar unos metros después.

Sobre las 18:00 llegamos a la entrada del Parque Natural de Invernadero, la altura de la carretera hace que tengamos una bonita vista de toso el Parque con el embalse de las Portas al fondo.



Por fín llegamos a Campobecerros.





En un principio teníamos pensado dormir en este pueblo. Vamos en el límite de tiempo de buscar alojamiento, esta zona esta mucho más desierta que la de ayer pero necesitamos ganar unas horas si queremos llegar a Santiago, así que forzamos la máquina y valoramos la opción de seguir aún a riesgo de que nos vuelva a pasar lo mismo que ayer. Ya nos preocuparemos cuando llegue el momento, así que seguimos dirección a Laza.

La carretera es una preciosa y estrecha alfombra negra entre verdes y exuberantes bosques. Al llegar a Laza está lloviendo bastante, encontramos el único Hostal a la entrada, pero parece cerrado. Seguimos hasta el pueblo y localizamos el albergue a modo informativo, preferimos encontrar algo fuera para no bloquear dos camas a los posibles peregrinos que puedan llegar. Volvemos al Hostal pero sigue cerrado así como la casa particular donde viven los duelos, así que ponemos rumbo a Verín.

Los hostales que localizamos están a pie de carretera con lo que el ruido está asegurado, así que buscando, buscando, llegamos al parador nacional de Verín donde preguntando por curiosidad nos hacen una oferta de alojamiento con desayuno que no podemos rechazar y como las dos últimas noche han sido austeras decidimos darnos un homenaje.

Vistas desde la habitación del Castillo de Verín.





Domingo 4 de Abril
Verín – Santiago de Compostela 216 Km
“Objetivo conseguido”



Después de un espectacular desayuno digno de señores y como solo en un Parador Nacional puedes hacer, retrocedemos por carretera hasta Laza para enlazar con el Camino Sanabrés de nuevo.

El paisaje es diferente, las montañas y grandes valles se van sucediendo y la ruta va atravesando pequeñas aldeas que nos enseñan los primeros orreos del viaje.

 



Una mezcla de emoción e inquietud viaja con nosotros en el coche, estamos muy cerca de nuestro objetivo y a la vez muy lejos, lo tenemos al alcance si no tenemos ningún percance. Hasta hoy no habíamos tenido esa sensación y en todo momento hemos barajado la posibilidad de no llegar, pero hoy, en estos momentos no podemos fallar, no tenemos más días libres, estamos a más de mil kilómetros de casa y tanto si llegamos como si no, mañana tenemos que poner rumbo a Barcelona, así que extremamos las precauciones y procuramos no perdernos mucho, cosa difícil en esta zona que aunque bien señalizada es muy laberíntica.

El terreno sigue siendo muy húmedo, más si cabe de lo que hemos encontrado hasta ahora



Pero de una belleza espectacular, no tenemos tiempo pero no podemos dejar de parar a echar algunas fotos que no logran captar la belleza de esos parajes.



En esta parte de la ruta, el Camino toma mucho asfalto y enseguida nos plantamos en Orense. La ciudad está mal señalizada y nos cuesta mucho atravesarla siguiendo el camino correcto, pero después de alguna ida y venidas y varias equivocaciones lo logramos y entramos otra vez en camino embarrados.



Psicológicamente el paso de Orense nos acerca más a nuestro objetivo, nada más lejos de la realidad, nos perdemos varias veces, la autovía corta el camino varias veces. Además han variado el camino haciendo una variante para visitar un monasterio cercano, hasta que nos damos cuenta de esto hemos perdido un valioso tiempo.

Como intentamos seguir en todo momento el máximo camino real, las vueltas son muchas y los pasos complicados se suceden.
  


Al entrar en un camino, este empieza a estrecharse de tal manera que hace imposible el avance, el suelo es un lodazal y el coche no avanza. Intentamos entrar en un campo que sale a nuestra derecha para poder dar la vuelta, pero el paso es mas estrecho. Por fin salimos marcha atrás pero las maniobras hacen que tengamos los muros de piedra a escasos centímetros de la chapa del coche, tenemos que estar continuamente maniobrando para no dañar el coche por fin salimos pero seguimos con el problema de dar la vuelta. Intentamos lo mismo en otro campo de la otra banda pero el coche no gira debido al lodazal, al final conseguimos encararlo quitando el 4X4 por un momento y conseguimos subir al campo a dar la vuelta.
 


Hemos perdido un tiempo precioso en apenas cien metros de camino, son las 16:00 y todavía tenemos mucho camino por delante.

Seguimos la ruta y las equivocaciones se suceden una y otra vez, las señales no están claras y las entradas y salidas continuas de pequeñas aldeas hacen que todo esto sea un laberinto. Ya no hay tiempo ni siquiera para tomar fotografías, estamos cerca, demasiado cerca como para tirar la toalla, así que nos aplicamos con la ruta como si estuviésemos en la 1000 Kashbas y así es como hacia las 18:30h por fin llegamos a Santiago de Compostela después de haber recorrido la península de Sur a Norte cumpliendo un sueño planeado hace mucho tiempo.


 

[size=12][/size][size=12][/size]

• Tweet

[lautrec]

Hola Dani, gracias por el reportaje, está espectacular..!
La verdad es que a veces no hace falta irse a sitios exóticos para tener un buen viaje y unas buenas experiencias.
Y gracias otra vez por comparttirlo! 

• Tweet

[PK-GR]

me apunto!

Luego ya opiniaré, pero tiene una muy buena pinta...

• Tweet

[eura]

Bonito viaje y reportaje, cada dia me doy cuenta de lo poco que conozco mi propio país.

• Tweet

[bordas4x4]

que guapada i que pedazo de cronica i de fotos, gracias por mostrarlo

• Tweet

[Montañes]

y tanto que gracias, esto alegra a unodurante una semana

y fotos-rutas con coches normales, que son las mejores a mis ojos

 

• Tweet

[Loocked]

¡¡Menudo curro de crónica !!!!!

¡¡¡Espectacular !!!

• Tweet

[karmela]

pedazo de crónica! impresionante!

• Tweet

[vilalta]

 Gracias por compartilo con todos 

• Tweet

[targui]

Pues si que es un pedazo de cronica ...y de ruta, cercana y preciosa....podrias pasar los tracs? a ver si pa septiembre aprovechamos y la hacemos y de paso visitamos al santo...que es su año.....
enhorabuena y un saludo

• Tweet

[PK-GR]

muchisimas felicidades por el objetivo cumplido, por la ruta, por la cronica y por todo.

Felicidades!!!

• Tweet

[trusky]

muy guapa la rutica que te as montado dani...........un saludo y recuerdos..........

• Tweet

[berlinguero]

Muy buena crónica, redactada y fotos con paisajes para perderse ,gracias por esta aventura vuestra por hacerla nuestra tambien .

Felicidades

• Tweet

[diceje]

  Gracias Dani, bonitos lugares y una cronica de LUJO.
   Saludos y gracias

• Tweet

[torb]

  un pedazo de viaje!!!, gracias por compartirlo

• Tweet

[Rsialfonso]

Enhorabuena por ese pedazo de viaje y muchas gracias por el trabajo realizado para compartirlo con nosotros.

• Tweet

[DaniTTouareg]

Muchas gracias a todos por los mensajes de felicitación, es un placer compartir estas historias con gente que sabe reconocer el esfuerzo que supone una cronica de este tipo.

Esperemos que podamos seguir compartiendo por mucho tiempo.

Un abrazo Trusky, mucho tiempo si estar en contacto.

• Tweet

[visontium]

que pasada, gracias por compartirlo con todos nosotr@s, la verdad que tenemos un tesoro paisajistico descomunal en nuestra piel de toro, que pasada.
un saludo

• Tweet

[Toni Hilla i Alòs]

por suerte aiun quedan zonas sin asfalto en la peninsula
garcias por la cronica

toni hilla i alòs

• Tweet

[Lady Marion]

Dani, que viaje más bonito. Pero no consigo ver la última parte, después de la foto donde se te ve de espaldas mirando ese campo de flores tan bonito se me corta. Y como siempre, muy buena crónica.

La Via de la Plata me trae muy buenos recuerdos. La hice en el 2005 con el primer Raid Toyota en el que participé, aunque con algunas variantes en la ruta. Y la hicimos al revés, desde Astorga hasta Tarifa, pasando por el Parque Natural de Monfrague.

Siempre lo he dicho, España tiene mucho que ofrecer.

Un saludo/Marion

• Tweet

[DaniTTouareg]

Hola Marión !!!

Un saludo y me alegra leerte después de tanto tiempo  . La cronica yo la veo completa  . Me acordé de tí durante el viaje ya que en una conversación que tuvimos salió el tema.

Un saludo

• Tweet

[Montañes]

marion si usas mozilla firefox prueba a ver-estilo de pagina-sin estilo 

• Tweet

[Lady Marion]

Yo también me alegro de leerte. Si hubiera sabido que vais a hacer la Via de la Plata, te hubiera dejado un dossier completísimo que alguien del SIP se curró para la ruta.

Y veo que has visto a Edu. Si hablas con el, dále un saludo de mi parte.

Igual es mi conexión de internet la que me hacer ver todo en blanco después de esa foto. Lo probaré de nuevo mañana, a ver si termino de verla. Montañes, ya lo he hecho lo que dices y nada. Sólo me pasa con este post, con otros no.

Un saludo/Marion

• Tweet

[DaniTTouareg]

Muchas gracias Marión, como verás el viaje salió "in extremis", así que nos apañamos con una guia del camino 

Seguramente veré a Edu este fin de semana que nos vamos a Segurilla a la KDD nacional del foro de Jeep's 

Un saludo

Dani

• Tweet

[txejo]

pedazo de viaje!!!con dos coches puedes estar todo el dia metido en lios...

• Tweet